Iglesia parroquial de Sant Feliu de Pallerols

La primera referencia de la existencia de una parroquia en Sant Feliu es del año 1039. Seguramente hacía referencia a la iglesia románica, que sustituía a otra de prerrománica a cuyo alrededor se ubicaba el cementerio. Esta iglesia románica estaba constituida por un edificio de nave única, con bóveda de cañón, con el ábside orientado a levante y la puerta al sur. Ya en los siglos XII y XIII, la iglesia se fue rodeando de masías constituyendo la sagrera, que en el siglo XIV se tuvo que ampliar. Debido a los terremotos de 1427 y 1428, esta primera iglesia quedó gravemente afectada y, aunque en un primer momento se adecuó de manera provisional, finalmente, se hizo evidente la necesidad de reconstruirla de nuevo. A mediados del siglo XVI se empezó con la reconstrucción de las capillas del lado este, lo que provocó que cambiara el sentido longitudinal de la nave, y ya a inicios del siglo XVII se terminó la fachada y el resto de capillas. En cuanto a la nave principal, es obra de 1630 y el campanario y la cubierta no se pudieron inaugurar hasta 50 años después. El resultado fue una iglesia de una sola nave con cuatro capillas laterales a cada lado, un presbiterio sobrealzado, dos sacristías y una Capella Fonda (una capilla separada del cuerpo principal). Fue edificada con un estilo gótico todavía persistente en las zonas rurales y construida con la ayuda de picapedreros franceses, que incorporaron un minucioso trabajo de la piedra en la fachada y el campanario. Precisamente, en una de las piedras, hay una de las primeras representaciones del escudo municipal, con las barras y tres estrellas.